Por lo general, los gatos no necesitan baños frecuentes, ya que su acicalamiento natural suele ser suficiente para mantener su higiene. Su pelaje denso les ofrece una protección natural contra las temperaturas extremas, y bañarles en exceso podría alterar esta barrera protectora de su piel.
No obstante, si consideras que un baño es estrictamente necesario, es importante tomar ciertas precauciones para asegurar su bienestar y evitar problemas de salud. Aquí te dejo algunas recomendaciones clave:
– Báñalo únicamente cuando sea realmente imprescindible para evitar la resequedad de su piel.
– Utiliza un champú formulado específicamente para gatos, ya que los productos para humanos pueden irritar su piel sensible.
– Asegúrate de que la temperatura del agua sea tibia, nunca caliente.
– Sécalo por completo después del baño, prestando especial atención para que no queden zonas húmedas en su pelaje.
– Evita mojarle la cabeza, ya que esto puede asustarle mucho.
✨Cuidarlos y alimentarlos mejor, es un POEMA®✨