Para saber si tu mascota está sufriendo un golpe de calor tendrás que observarlo atentamente durante los días con temperaturas extremas. Es importante que estés alerta ante los siguientes síntomas:
- Si está confuso, ansiedad y muestra aturdimiento.
- Saliva excesivamente, fuertes jadeos y gemidos, encías muy rojas.
- Piel caliente al tacto o incluso tiene convulsiones.
- Aumento del ritmo cardíaco.
- Presenta diarrea.
- Se tambalea y cae.
- Se tumba y no quiere volver a levantarse.
¿Qué hacer?
- Refrescarlo con agua (no puede estar fría). Puedes usar paños húmedos.
- Abanicarlo o colocarlo cerca de un ventilador.
- Ofrecerle cubitos de hielo para que los chupe.
- Mantenerlo hidratado ofreciéndole agua constantemente.
- Las almohadillas son el sistema de autorregulación de los perros, por lo que sería bueno humedecerle la zona junto con el hocico, la cabeza, cuello y axilas.
- Y obviamente y lo más importante, llevarlo a su veterinario.
Alimentarlos mejor, es un POEMA®
